Abordando lo incómodo: diálogos que desafían en la sociedad actual

Cuando nos preguntan qué hacemos desde Triple Impacto tenemos la respuesta larga, contando con detalle nuestras intervenciones, y la respuesta corta que contiene a todas las demás: “Trabajamos para lograr climas laborales óptimos, equipos de trabajo efectivos y de alto rendimiento, en definitiva, más vínculos y más humanizados”.

Somos tres mujeres que, desde distintas disciplinas y miradas, integramos saberes y experiencias en pos de dar herramientas a las organizaciones, empresas e instituciones.

Nuestro norte es aportar a crear o potenciar organizaciones más saludables en su estructura, con sus miembros y con el entorno en el cual ofrecen sus productos o servicios. Estamos comprometidas con el IMPACTO en las personas, en el medio ambiente y en la comunidad.

Acompañamos y asesoramos para crear un círculo virtuoso frente a los conflictos, donde las personas puedan gestionarlos adecuadamente, generando, así, un equipo de trabajo más motivado y fidelizado con la organización, dando como resultado mayor producción y mejora de sus servicios ante la competencia y el entorno comunitario en el que se plasme.

El modelo de gestión tradicional está siendo reemplazado por formas más participativas, más colaborativas y humanas de hacer la empresa/organización. Ellas están integradas por personas, y las personas tienen comportamientos, patrones, sistemas, emociones, deseos y su propia historia. Si los incluimos en la gestión, daremos pasos a mejoras y resultados sostenibles.

En este espacio, tendremos la valiosa oportunidad de compartir con ustedes algunas ideas, tendencias, necesidades que pretenden ser disparadores de conversaciones, reflexiones, idas y vueltas que nos harán más humanos.

En esta primera oportunidad traemos algo sobre lo que siempre nos consultan en los talleres:

¿Cómo me preparo para tener una conversación difícil o incómoda? Imaginemos que se tiene que abordar un bajo rendimiento en el equipo, las constantes llegadas tarde o uso del celular en el trabajo, la falta de compromiso, etc. ¡La lista puede ser infinita!

Este tipo de charlas son inevitables en la vida personal y profesional. Ya sea para abordar conflictos, dar retroalimentación crítica o comunicar noticias desafiantes, saber cómo enfrentar estas situaciones con habilidad es esencial (de lo contrario, los resultados se nos pueden ir de las manos).

Antes de darles algunos tips les decimos el NO: nunca dejar de abordarlas, estas conversaciones son incómodas, sí; preferimos no tenerlas, sí; pero evitarlas, procrastinarlas, solo profundiza el estallido final: cuando ya no hay paciencia o los límites están tan difusos que decimos o hacemos cualquier cosa desde el desborde.

Entonces, pasemos a los SÍ

1. La preparación como pilar fundamental:

Antes de entrar en una conversación difícil, tomarse el tiempo necesario para prepararse. Definir claramente el propósito de la conversación, identificar los objetivos y anticipar posibles reacciones y emociones.

En el caso del bajo rendimiento del equipo: antes de la conversación, recopilar datos específicos sobre el desempeño, identificar ejemplos concretos y formular soluciones posibles.

1. Escucha activa y empatía:

La escucha activa es fundamental en cualquier conversación, especialmente en situaciones difíciles. Practicar la empatía al intentar comprender los sentimientos y perspectivas del otro. Asegurarse que la otra persona se sienta escuchada y comprendida, más allá de los acuerdos (o no) sobre los aspectos de fondo. Por ejemplo: "Entiendo que esta situación puede ser frustrante para vos. ¿Podrías decirme cómo te hace sentir esto en realidad?

1. Utilizar "Yo" en lugar de “Vos”:

Al expresar las propias preocupaciones, evitar acusar o culpar directamente al otro. Utilizar declaraciones con "yo" para expresar sentimientos y perspectivas sin poner a la otra persona a la defensiva. Como por ejemplo: Tengo dificultades en las últimas reuniones para comenzar a tiempo. ¿Podemos discutir cómo podemos abordar este problema juntos?".

1. Mantener la calma y el control emocional:

Es crucial mantener la calma, incluso en situaciones emocionales desafiantes. Gestionar las propias emociones y evitar respuestas impulsivas. La serenidad contribuye a un ambiente propicio para la resolución de problemas: "Entiendo que esta noticia puede ser difícil de aceptar. Quisiera discutir cómo podemos trabajar juntos para manejar esta situación."

Si identificamos un “mal clima emocional” o el estado de ánimo no es el propicio para entablar la conversación, mejor postergar y reprogramar el encuentro!

1. Proporcionar soluciones y compromisos:

En lugar de solo señalar problemas, trabajar en conjunto para encontrar soluciones y compromisos. ¡Asegurarse de que todas las partes se sientan parte del proceso de resolución y si alguien falta en esa reunión, a llamarlo! Acá va ejemplo: ¿Cómo podemos colaborar para encontrar una solución que funcione para ambos?".

¡¡¡¡Vamos que se puede!!!!

Afrontar conversaciones difíciles e incómodas con éxito requiere habilidades de comunicación efectivas y un enfoque estratégico. Al utilizar herramientas como la preparación, la escucha activa, el lenguaje cuidadoso, la gestión emocional y la búsqueda de soluciones, se puede convertir, incluso las conversaciones más desafiantes, en oportunidades para el crecimiento y la resolución constructiva.

¡Adelante, enfrenta esas conversaciones con confianza!

Y, desde Triple Impacto, estamos para ayudarte.

@somostripleimpacto

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INGRID KÜSTER

Abogada

Mediadora

MG en resolución de conflictos

Mánager de REDIRP Bariloche

Asesora legislativa

Oradora en charlas Tedx BRC

SABRINA SALVA

Tec. Superior en Comercio

Diplomatura en gestión estratégica de recursos humanos

Coach ontológico y comercial

Disertante en el Congreso Latinoamericano de ventas ALAVEPRO 2022

MARÍA CAMPOLONGHI

Coach ontológico profesional

Docente

Psicopedagoga

Deputy REDIRP Bariloche

Autora de “Mejor sí hablar de ciertas cosas. La muerte y el dolor como impulsores de la vida”