Colonia Suiza vivió otra gran Fiesta del Curanto

A pesar del día gris que amenazó con lloviznas y fuertes vientos, el fin de semana se disfrutó a pleno en Colonia Suiza con una nueva edición de la Fiesta del Curanto.

Este domingo, con una alta concurrencia de gente, tanto turistas como residentes participaron de todas las propuestas del evento que se convirtió en un clásico del lugar.

Como cada año, desde hace ya unas dos décadas, Rubén “El gringo” Nielsen Goye, fue el que encabezó la preparación del curanto, una comida que es referencia en Colonia Suiza y que se puede disfrutar dos veces por semana en la feria.

Además de la comida, también hubo espectáculos musicales, ballets folklóricos y la tradicional feria, por la que cada domingo, cientos de personas llegan a Colonia Suiza para comer algún plato, comprar o disfrutar de las artesanías y recorrer el pequeño lugar que tanta historia guarda.

El domingo gris se disfrutó igual en Colonia Suiza con comida, música y shows en vivo. Foto: Marcelo Martínez.

Pasado el mediodía se izó la bandera nacional y con la entonación del himno, se dio por inaugurada la fiesta con un amplio cronograma de actividades para disfrutar en familia.

El curanto se destapó cerca de las 14. Se prepararon unas 150 porciones que tenían un costo de 5500 pesos para que coman dos personas e incluían carne de cordero, vaca, cerdo y pollo, además de una amplia variedad de verduras.

El curanto, es una forma tradicional de cocinar, propia del archipiélago de la Isla Grande de Chiloé, al sur del país trasandino. Fue introducida a Bariloche en el 1900 por la familia Goye, primeros pobladores de Colonia Suiza.

"El Gringo" Nielsen es el referente del curanto en el poblado. Foto: Marcelo Martínez.

La forma de cocción de este plato típico es bajo tierra con piedras calientes que son cubiertas con hojas de maqui, una planta autóctona de la zona cordillerana con hojas muy grandes. Allí se colocan carnes de vaca, cerdo y pollo; verduras y frutas. Las mismas son cubiertas con tierra, previo a colocar una gruesa capa de telas El vapor generado por las piedras calientes cocina los alimentos en unas dos horas y les otorga un sabor muy particular.

La Fiesta Nacional del Curanto tiene largos años de historia y en cada edición se vuelve más exitosa. No solo se congregó una gran cantidad de personas en la zona donde se realizaba el curanto, si no que en toda Colonia Suiza se podía ver gente disfrutando del domingo. (ANB)