Realizan trabajos de hormigonado en el barrio Belgrano Sudeste

Transitar en Bariloche en temporada de verano es un caos. Al enorme número de automóviles locales, se le suma una gran cantidad de turistas que llegan en sus autos particulares y los vehículos de alquiler.

La ciudad se encuentra en constante crecimiento poblacional y, por ende, esto hace que suceda lo mismo con el parque automotor. Hasta hace unos años, el tránsito era prácticamente normal. Sin embargo, hoy en día existe un colapso vehicular que se extiende a lo largo y anoche del territorio barilochense.

Las largas colas y embotellamientos que se producen a la hora del regreso de Circuito Chico en dirección al centro es una postal diaria que caracteriza la ciudad. El tramo que antes se transitaba en poco tiempo, ahora se tarda una eternidad.

Con el objetivo de generar un orden en el tránsito es que, desde hace algunos meses, se están llevando adelante algunas obras de remodelación en distintas partes de la ciudad. Una de ellas tiene que ver con el hormigonado en calle Emilio Morales entre Anasagasti y Vilcapugio.

El objetivo es darle continuidad al asfalto que, actualmente, sólo llega hasta Anasagasti, lo que genera que la mayor parte del tránsito opte por continuar para arriba por calle Curuzú Cuatiá.

“Una vez terminada la obra, servirá para descomprimir Curuzú Cuatiá y todo el circuito por Pasaje Gutiérrez, además del avance que significará para el barrio y las personas que residen en la zona. Sin perder de vista que, en esas inmediaciones, además, funcionan establecimientos educativos y una amplia zona comercial y residencial”, informó en un comunicado Claudio Otano, secretario de Ambiente y Desarrollo Urbano.

La obra tiene un presupuesto de 49.3 millones de pesos y es financiada por el Gobierno de Río Negro a través del Ministerio de Obras y Servicios Públicos bajo la modalidad “obra delegada”, por lo que el Municipio se ocupará de la coordinación, supervisión y control de la misma. (ANB)