El rugby femenino de Bariloche RC cerró el año cumpliendo un sueño

Un paso gigante. Con mucho esfuerzo, con mucho trabajo y pasión, el rugby femenino del Bariloche Rugby Club vivió, el pasado sábado 11, una jornada histórica. En el cierre de las actividades oficiales de la Unión de Rugby de los Lagos del Sur, la institución disfrutó del primer encuentro en su campo de juego.
Bariloche RC fue el anfitrión de una cita inolvidable en la flamante cancha ubicada en Don Orione. Y en ese escenario, construido con horas de esfuerzo, trabajo y muchas ganas, también estuvieron  Draig Goch de Gaiman y Huemules de Lago Puelo.

“El sábado 11 de diciembre fue un día muy emocionante para nosotras ya que bueno pudimos tener nuestro primer encuentro en nuestra casa, en Bariloche y poder ser nosotras las anfitrionas antes de que termine el año. Todo este año viajamos un montón con las chicas, a encuentros en Esquel, El Bolsón, Lago Puelo e incluso fuimos hasta Cipolleti donde nos recibió Marabunta para el Regional de Clubes”, contó Denisse Guerrero, jugadora del Bariloche RC.

Lo logrado es muy grande y seguro ayudará al crecimiento de la actividad. Durante este año, el trabajo fue gigante para poder tener la cancha y también para asistir a los diferentes encuentros oficiales.
“Por suerte a lo largo de este año pudimos cumplir con todos los encuentros que se realizaron en distintas partes de la Unión, gracias a que con las chicas trabajamos un montón para poder pagar los viajes, cocinando prepizzas, budines, tortas fritas para después venderlas. Nosotras entrenamos martes, jueves y sábados. Los días que no entrenábamos los dedicábamos a cocinar siempre que sabíamos que se acerca algún encuentro”, agregó Denisse.

Pero las ganas por ser locales pudieron más y las chicas le dedicaron muchas horas al trabajo y no fue sencillo. Hicieron de todo para conseguir el propio espacio.

“Hasta que un día nos propusimos trabajar nuestra cancha y  hacer nuestro encuentro acá. A las 18 empezaba nuestro entrenamiento, a las 19,30 parábamos para poder dedicarle tiempo a la cancha, cortando el pasto, tapando pozos, desmalezando, picando tierra, colocando las H y mucho más. Y así lo hicimos hasta las 22 horas, todo con herramientas que traía cada una de nuestras casas, como picota, pinza, martillo, bordeadora, pala y carretilla. No nos quedábamos más tiempo porque nuestra cancha queda en el kilómetro 15.500 de Bustillos  y a la mayoría de las chicas nos lleva una hora de viaje para llegar a nuestras casas.  Así todo trabajamos todo el mes, seguimos vendiendo budines los días que no entrenábamos y también era lo mismo, empezar a las 8 de la mañana, para salir a ofrecerlos a las 16 de la tarde por el Centro Cívico”, detalló la jugadora, hablando en el nombre de todas sus compañeras.

La primera jornada en casa ya está en la historia y poco importan los resultados de ese día. “Todo fue trabajo a pulmón. Gracias a todo ese esfuerzo hoy en día tenemos nuestra cancha y la pudimos disfrutar antes de que se acabe el año, recibimos a las chicas de Draig Goch que vinieron desde Gaiman y las chicas de Huemules que se vinieron desde Lago Puelo y también vinieron chicas de Junin de los Andes. Fue encuentro hermoso y muy emotivo a puro rugby femenino. La verdad que muy lindo, Draig Goch no es un equipo de la Unión de los Lagos  y vinieron hasta acá con terrible viaje a querer jugar con nosotras y en nuestra cancha, estamos muy muy agradecidas y muy felices por el lazo de amistad que se formó con ellas, fue también  muy lindo jugar acá y que nuestra familia nos pueda venir a ver y a apoyar, la familia de todas me refiero, ya que cuando jugábamos lejos solo iba la familia que podía viajar”, concluyó Denisse. (ANB)