viernes 26 de abril de 2024

Feria de Santo Cristo: sin legislación, sin control y sin política social

Los puestos de venta se multiplicaron en los últimos años y su crecimiento se encuentra alejado del marco legal. Viejas y nuevas promesas para una respuesta que tarda en llegar.

viernes 29 de enero de 2016
Pablo Chamatropulos, jefe de Gabinete del municipio.

La venta ambulante y callejera en la ciudad adquirió un incremento notable en el último tiempo. Cada vez son más los puestos y los productos que florecen en las veredas barilochenses. La feria ubicada frente a la Iglesia Santo Cristo es uno de los casos más emblemáticos. ¿El problema? Su ampliación se aleja cada vez más de las regulaciones municipales.

La historia del lugar está ligada a los tiempos de crisis. Con el devenir de los años, la comercialización callejera de este espacio logró alcanzar grandes dimensiones por fuera de la ordenanza 1702-CM-07, que regula este tipo de negocio.

La legislación en cuestión aspira a “contribuir a la actividad económica de la ciudad de San Carlos de Bariloche con un instrumento que permita la realización de esta actividad con los mayores resguardos posibles en materia de higiene y salubridad”. Pero la situación dista mucho de esa convicción y no se trata de una omisión o infracción de la normativa, sino por el contrario, de un desentendimiento total de ella y de una evidente falta de control por parte del Estado.

En principio, la ordenanza 1702, aprobada en abril del 2007, estipula que el municipio “determinará la cantidad y los espacios públicos donde permitirá la instalación de los puestos fijos temporarios, los que licitará anualmente en oferta pública, como así también la cantidad de vendedores y las zonas de acción para la venta ambulante móvil o de recorrido habitual, los que serán adjudicados y habilitados”.

Desde ya, las licitaciones en oferta pública no son realizadas y el orden que se ha establecido es uno interno, entre los mismos puesteros. De hecho, son varios los incidentes que se registraron por diferencias respecto a los espacios que ocupa cada vendedor.

Otro punto importante enmarcado por la normativa incumplida es el referente a la higiene y manipulación de alimentos. Es que en esta feria se mezclan juguetes, ropa y comida sin ningún tipo de consideraciones. Y por sobre todas las cosas una falta absoluta de control.

“Se exigirá la habilitación bromatológica de las instalaciones donde se elabora el alimento a vender como así también los utensilios y equipamiento utilizado para su elaboración. Esta habilitación bromatológica deberá ser otorgada por el área de Inspección General Municipal”, establece la ordenanza.

Por otro lado, según la reglamentación, los vendedores categoría F -de puesto estructural ubicados en espacios públicos autorizados mediante licitación- deberían efectuar un pago mensual de derechos municipales, y un canon mensual por concesión de espacio físico. Ninguna de las dos cosas sucede en la actualidad.

¿Qué dice el gobierno local?

Consultados por ANB, autoridades del área de Inspección General del municipio, afirmaron que “la ordenanza que regula este tipo de venta está muy fuera de tiempo. Cuando se promulgó, este tipo de comercialización no tenía el volumen que tiene ahora”.

Por su parte, el jefe de Gabinete Pablo Chamatropulos, expresó –en forma más terminante– que como gobierno “nos resulta absolutamente inconveniente la venta ambulante y callejera, y trabajamos para desalentarla fuertemente". "Estamos avanzando para erradicarla en forma definitiva, pero eso lleva un proceso complejo y largo”, dijo.

Adelantó que se está considerando la posibilidad de trasladar los espacios donde se aglomera este tipo de comercio. Y en este aspecto, la feria de Santo Cristo sería uno de los principales ejes a correr, según explicaciones del funcionario.

“Vamos a ser muy responsables en aquellos casos donde realmente la venta sea una urgencia y una cuestión social inexorable. Vamos a trabajar para darles una alternativa y que puedan realizar la actividad comercial en un marco normativo, previsto y que no sea en la vía pública”, afirmó Chamatropulos.

¿Qué pasó en la gestión Martini?

Complemento de la 1702-07, existe la resolución 728-I-2014, firmada por la entonces intendenta María Eugenia Martini y su secretario de Gobierno, Daniel Natapof, en la que se admite el carácter de clandestino de espacios como el de la feria de Onelli y 25 de Mayo. Y por ello, se propone la creación “en el ámbito de la Dirección de Inspección General dependiente de la Secretaria de Hacienda, un registro municipal de aspirantes a obtener un permiso de venta ambulante de puestos fijos temporarios de productos no alimenticios”.

Pero desde la Dirección de Inspección actual aseguraron que la medida se hizo en su momento y por muy poco tiempo, con lo cual “también presenta una desactualización significativa”.

En concordancia con la resolución firmada por Martini, durante 2014 se presentó en el ámbito del Concejo Municipal un proyecto que también buscaba re-ordenar y darle un margen de legalidad a estos espacios.

El proyecto 558-14 proponía “regular los requisitos que deben cumplir los emprendimientos que pretenden instalarse bajo la modalidad de Ferias Multipuntos en el ejido de la Municipalidad de San Carlos de Bariloche”.

A través de una serie de articulados, la iniciativa aspiraba a delimitar permisos, personerías jurídicas, y espacios cubiertos para la instalación de ese tipo de mercados. De hecho, planteaba que el funcionamiento se diera en las calles Onelli y/o Elordi  en toda su extensión, en forma exclusiva y en cumplimiento de los cánones de sanidad, edificación y planeamiento entonces vigentes.

Sin embargo, aquel proyecto deambuló durante –prácticamente– todo el año pasado por las comisiones del órgano legislativo municipal, sin arribar a ningún destino, y ante el cambio de gobierno se sumó al pilón de iniciativas olvidadas.

La nueva gestión dice estar trabajando en el tema que ha sido tantas veces postergado y relegado. Uno que, aunque pese a muchos, hace a la economía de cientos de familias de la ciudad. Economía, que hoy se encuentra fuera de las fronteras legales, prometiendo posibles situaciones de vulnerabilidad no sólo para sus protagonistas sino para la ciudad entera. (ANB)

Producción: Claudia Olate, Lucía Arana, Luis Leiva y Nicolás Malpede. 
Redacción: Claudia Olate, Lucía Arana y Nicolás Malpede. 
Diseño: Florencia Montenegro. 
Fotos: Emiliano Rodríguez.

Te puede interesar
Últimas noticias