Negociaciones
La Provincia asegura estar abierta al diálogo con los gremios de Salud y Educación
La situación se agravó luego de que el personal de enfermería se uniera a un paro indefinido, en rechazo a un bono de $60.000. El Gobierno busca abrir canales de diálogo, con reuniones programadas para tratar de encontrar una solución satisfactoria.
En un clima de tensión por demandas de mejoras laborales, el Gobierno de la Provincia de Río Negro aseguró que busca reafirmar su compromiso con el diálogo como vía principal para la resolución de conflictos. Con el objetivo de establecer acuerdos que beneficien a ambas partes, se programaron una serie de reuniones cruciales con representantes de trabajadores de Salud Pública y Educación para la próxima semana.
El viernes 5 de abril, en una jornada de intensas negociaciones, las autoridades provinciales tienen agendadas dos reuniones clave. Durante la mañana, el encuentro será con la Asociación Sindical del Personal de la Salud de Río Negro (ASSPUR), seguido por una sesión vespertina con los representantes de los gremios Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) y la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), enfocadas en abordar las inquietudes y demandas del sector de la salud.
La agenda de diálogo continúa el martes 9, con una nueva reunión paritaria entre las autoridades del Ministerio de Educación y el gremio docente UNTER. Esta sesión, que se llevará a cabo en la Secretaría de Trabajo, buscará hallar puntos de acuerdo en relación con las demandas de los educadores de la provincia.
Asimismo, el miércoles 10 de abril fue la fecha reprogramada para la mesa de la Función Pública, en la que participarán nuevamente ATE y UPCN, esta vez enfocados en las condiciones laborales y reivindicaciones de los trabajadores estatales de diferentes sectores.
La situación en el ámbito de la salud pública de la Provincia de Río Negro se agrava, especialmente en el Hospital Zonal “Ramón Carrillo” de Bariloche, centro neurálgico que atiende a pacientes de toda la provincia y que vio sus servicios afectados tras la adhesión del equipo de Enfermería a la huelga iniciada en respuesta al anuncio gubernamental de un bono de $60.000 para todos los empleados de la administración pública provincial. Esta medida de fuerza llevó a que varios pacientes fueran derivados a centros de salud privados, evidenciando la tensión y el impacto directo del conflicto en la atención sanitaria.
La decisión de sumarse a la huelga fue también adoptada por las jefaturas de área del hospital, marcando un hito en la lucha gremial, con un paro por tiempo indeterminado que cuenta con el apoyo de la Asociación Sindical de Salud Pública de Río Negro (Asspur), la Federación Sindical de Profesionales de la Salud (Fesprosa), ATE y UPCN. El conflicto escaló cuando enfermeros autoconvocados cesaron sus actividades en las guardias, complicando aún más el funcionamiento del establecimiento.
“Lo seguiremos sosteniendo hasta que el gobierno escuche nuestro reclamo y haya una mesa salarial urgente. El hambre no espera más y no se negocia. Durante la pandemia nos catalogaron de héroes, y hoy somos todos postergados y desconocidos por las autoridades”, afirmaron desde la asamblea autoconvocada de Enfermería. (ANB)
