Polémica
Taxistas y remiseros en alerta por el desembarco de otra aplicación de transporte
Cuando en mayo, Uber anunció que comenzaría a operar en Bariloche, se desató un conflicto que derivó en cortes de calles y protestas por parte de remiseros y taxistas. El malestar del sector derivó en que se prohibieran los viajes a través de la aplicación, pero ahora, una nueva firma quiere desembarcar en la ciudad.
En los últimos días se vieron panfletos y hasta una camioneta tipo van ploteada de Cabify, promocionando que la aplicación comenzará a estar operativa en la ciudad.
Al igual que Uber, funcionan a través de una aplicación que se instala en el teléfono celular mediante la cual se contratan los viajes con choferes que se dieron de alta como tal, presentando algunos requisitos solicitados por la empresa.
La posible llegada de otra aplicación revivió el malestar de taxistas y remiseros que lo consideran una “competencia desleal”, ya que, según explicó José Villagra, de la Asociación de Remiseros, los trabajadores locales cumplen con una serie de requisitos, tanto vehiculares como de trámites, que los choferes de las aplicaciones no estarían obligados a realizar.
“Esto da mucha impotencia, mucha bronca. Nosotros tenemos que hacer cada seis meses la Revisión Técnica Obligatoria, cumplimos con todas las exigencias de la Municipalidad en cuanto a papeles y trámites, lo cual nos parece perfecto porque somos un servicio que tiene que tener todas las medidas de seguridad, pero parece que es para algunos sí y para otros, no”, remarcó el hombre.
Este jueves, remiseros y taxistas mantuvieron una reunión para delinear los pasos a seguir ante esta noticia. Villagra indicó que se encuentran en estado de asamblea permanente, aunque no tienen previstas medidas de fuerza, pero “nos mantenemos en la misma postura”.
A pocas semanas de que asuma el nuevo intendente, Walter Cortés, hubo reuniones entre las partes para buscar una salida al conflicto. “El interés en trabajar juntos está, ver si podemos ordenar de alguna manera todo esto”, señaló.
“Nos siguen invadiendo, siguen mirando para otro lado, no hay fiscalización. Es tierra de nadie, eso molesta mucho”, remarcó el referente de la Asociación y añadió que “como son aplicaciones, es todo fantasma, no hay formas de regularla. Nosotros no estamos en desacuerdo en la competencia, pero no tienen ni siquiera un lugar físico. La competencia es buena y sana y sirve para mejorar, pero en este caso, es desleal”.
Luego de la polémica que generó la llegada de Uber, el municipio envió al Concejo Deliberante un proyecto para intentar regular la actividad comercial de traslado de pasajeros a través de aplicaciones móviles.
El proyecto no tuvo quórum en la Comisión de Tránsito y Transporte y no continuó con su tratamiento, dejando a la situación nuevamente en la nada. (ANB)