Hasta siempre a un reconocido guía de montaña

El deceso de Federico Olivera generó profunda tristeza entre la gran cantidad de gente que lo conoció. Durante muchos años se desempeñó como guía de montaña y fue una persona querida por todos en el ambiente.

Desde distintas instituciones, expresaron su dolor al conocer la noticia de su fallecimiento, este miércoles horas después de que fuera encontrado en el arroyo Gutiérrez, en delicado estado de salud.

Desde la Intendencia del Parque Nacional Nahuel Huapi manifestaron que lamentan “profundamente el fallecimiento de Federico Olivera, un querido guía de montaña del Parque Nacional Nahuel Huapi. Muy reconocido y apreciado en la sociedad barilochense y cuñado de nuestra compañera guardaparque Marcia Urbinati”.

También desde el Club Andino Bariloche expresaron sus condolencias por la partida de Federico, “un gran compañero de la montaña”, como lo recordaron.

Por otro lado, desde la Asociación Argentina de Guías de Montaña, emitieron un sentido comunicado. “Tu alma voló hacia las montañas eternas, donde algún día nos reencontraremos…”, expresaron.

Federico Olivera, tenía 48 años, y si bien era oriundo de Buenos Aires, vivía en Bariloche hace casi tres décadas. Se recibió como Guía de Cordillera y Trekking en marzo de 1996 y en marzo de 2014 recibió el título de Guía de Montaña.

Federico eligió a Bariloche como su hogar hace casi 30 años. Foto: Web Asociación Argentina Guías de Montaña.

“Siempre te recordaremos por tu buen humor y compañerismo. Trabajaste mayoritariamente en las montañas de Patagonia Norte y muchas veces en la zona del Tronador. También fuiste guía en la Escuela de Montaña del Club Andino Bariloche y en su fantástico Grupo de Excursionista de Adultos (GEDA), donde supiste ganarte la amistad y el cariño de decenas de caminantes”, indicaron desde la AAGM.

“No vamos a despedirte Fede… Te seguiremos acompañando. Estarás en las picadas, en los filos y en los refugios de montaña”, remarcaron.

Federido también trabajó varios años en el programa Esquí Escolar, donde acompañaba y enseñaba a niñas y niños de escuelas públicas, en sus primeros pasos en los deportes invernales. 

Además, fueron cientos los mensajes en redes sociales y en publicaciones de los medios locales en los que amigos, allegados y gente que fue a la montaña con él, lo despidieron y recordaron, “siempre con una sonrisa”. (ANB)