Tengo unos kilitos de más: ¿estética o salud?

Por María del Rosario Puente Olivera*

El exceso de peso en medicina se denomina sobrepeso u obesidad y se relaciona principalmente con un aumento de tejido adiposo o tejido graso.

Se considera patológico cuando supera el 30% de la composición corporal en las mujeres y si es mayor al 25 % de la composición corporal en hombres. (Los valores normales de tejido graso se van modificando con la edad.)

El tejido adiposo se presenta en muchos sitios del organismo: está ubicado el tejido celular subcutáneo (justo abajo de la piel) donde actúa como aislante, ayuda a mantener la temperatura corporal y como protección física  en ante traumatismos; también se encuentra entre los órganos abdominales como el hígado, el páncreas, los intestinos y se denomina tejido adiposo intraabdominal o perivisceral, cumpliendo un rol de regulación del metabolismo  éste tejido adiposo perivisceral es el que marca el mayor riesgo clínico como vamos a ver màs adelante.

La obesidad se define en la práctica clínica a través de 2 mediciones:

El índice de masa corporal que marca si la persona tiene un peso corporal  adecuado a su estatura y se calcula de  la siguiente manera:  

Indice de Masa Corporal = Peso en kg  dividido la  talla  en metros al cuadrado:     IMC= Peso / talla 2

El Perímetro de cintura: consiste en medir la circunferencia de la cintura  a la altura del ombligo. Esta determinación tiene importancia porque se correlaciona con el aumento del tejido adiposo perivisceral.

¿De dónde surgen estas definiciones?

En estudios epidemiológicos se evidencia que a mayor Indice de masa corporal y cuando el perímetro de cintura supera los valores mencionados, hay un aumento de la aparición de las denominadas enfermedades crónicas no transmisibles que son la diabetes mellitus tipo 2, el infarto del corazón (cardiopatía isquémica), accidente cerebrovascular,  hígado graso, lo que se denomina mayor riesgo cardiovascular.

Las enfermedades crónicas no transmisibles constituyen la principal causa de enfermedades y de muerte (antes de la pandemia del COVID y postpandemia) según un informe de la Organización mundial de la salud 7 de las 10 causas principales de defunción en 2019 fueron enfermedades crónicas no transmisibles. https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/the-top-10-causes-of-death

Pero  si el  IMC es Normal, ¿está bien querer bajar de peso?

Puede pasar que el peso está dentro de parámetros adecuados en relación a la talla pero sin embargo uno quisiera tener unos kilos menos: esto está asociado al estereotipo actual de belleza que tenemos influenciados por la  sociedad.

Por supuesto que no está mal querer bajar de peso aunque no sea solamente por salud, pero es importante tener en cuenta qué acciones vamos a tomar para este objetivo, para no caer en conductas que sean perjudiciales para la salud tanto física como mental.

Cada persona es diferente y cada cuerpo es único, y puede encontrar su propio equilibrio en salud y estética.

El problema es cuando ese ideal.de belleza, ese cuerpo ideal se transforma en el único objetivo  y se está dispuesto o dispuesta a cualquier cosa con tal de bajar de peso y lograr ese cuerpo ideal, que muchas veces es inalcanzable.

 Entonces pueden aparecer conductas alimentarias erráticas que pueden ser el inicio de los denominados trastornos alimentarios que afectan la salud tanto física como mental y emocional.

• Dietantes: con dietas muy restrictivas con descenso de peso, seguidas de episodios de compensación, con sensación de culpa y rebote en el peso que generan finalmente mayor aumento de peso;
• restricción excesiva de comidas, con falta de nutrientes importantes para el organismo, y trastornos en la percepción de la imagen corporal;
• conductas purgativas y compensatorias como provocar vómitos después de comer, o exceso de actividad física para compensar lo que comimos

Hábitos para la salud

Tengo unos kilitos de más: ¿estética o salud ?

Querer  bajar de peso es completamente válido sea  la motivación estética o la salud cuando ya hay un riesgo clínico, lo importante es pensar cómo encararlo.

La forma de abordarlo es adquirir hábitos para tener una vida saludable sabiendo y aceptando que todos los cuerpos son diferentes:   diversidad de cuerpos,  diversidad de formas.

Llevar una alimentación equilibrada con todos los nutrientes necesarios, que provea la energía necesaria, adecuada a cada persona; mantener una actividad  física regular  son  hábitos que siempre asociamos como la llave para  una vida saludable y un peso adecuado.

 Sin embargo ya en los últimos años el enfoque desde la Medicina del estilo de vida tiene en cuenta otros hábitos que también influyen en el mantenimiento de una vida saludable y del peso corporal y que es importante revisar:

• los hábitos de sueño,
• el manejo del estrés
• mantener lazos sociales que nos hagan bien
• el consumo de sustancias nocivas (como el tabaco, alcohol y drogas)

¿Te animás a revisar tus hábitos para pensar si están alineados con una vida en salud?

Para conocer más sobre estos temas y trabajar en tus hábitos es conveniente el asesoramiento profesional. Esta evaluación permite una correcta evaluación inicial del estado de salud y a partir de dicha evaluación iniciar el camino personal más adecuado hacia la adquisición de hábitos para la salud.

*Médica Especialista en Nutrición MP1895

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