Día de la Seguridad Vial: “nos falta muchísima responsabilidad individual”

Por Cecilia Russo.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente 1,3 millones de personas mueren alrededor del mundo como resultado de accidentes de tránsito cada año. En Argentina, durante el primer cuatrimestre de 2022, fallecieron 1.339 personas en siniestros viales.

En el Día de la Seguridad Vial, ANB dialogó con Cristina Painefil, responsable del observatorio de esta temática y se abordaron temas como la alcoholemia al conducir, el incumplimiento de las normas de tránsito y lo complejo del tránsito en Bariloche.

“El lema de este año es un símbolo que es +=- (Más respeto por las normas de seguridad de tránsito  es igual  a menos vidas perdidas). Lo que básicamente nosotros queremos hacer hincapié es en la importancia del cumplimiento de la normativa, no solamente para los conductores sino también para ciclistas, motociclistas, peatones y todos los que compartimos espacios comunes”, dijo la referente del área.

Painefil insistió en la necesidad de “pararnos desde el lugar de la responsabilidad individual”: “Si no prima la responsabilidad individual que cada uno de nosotros tenemos al momento de ir a sacar la licencia nacional de conducir, no hay manera  de no ponerse en riesgo”.

“Conducir no es un derecho”, remarcó; y amplió: “es un privilegio que podemos tener si cumplimos con todas las pautas que establece la Ley Nacional de Tránsito. Ese privilegio debemos saber usarlo y desgraciadamente, una vez que tenemos nuestra licencia, todo lo que aprendimos cuando fuimos a rendir nos lo olvidamos inmediatamente cuando estamos en los espacios comunes. Todas las cosas que hacemos mal tienen que ver con nuestra conducta individual”.

Consultada sobre cuál es la causa principal de los accidentes viales, la referente del Observatorio señaló que “es complejo establecer un factor porque es hilar demasiado fino pero siempre tiene que ver con el no respeto a la norma de tránsito, ya sea porque pasamos un semáforo en rojo, porque conducimos  con mayor graduación alcohólica a la que tenemos permitida, porque nuestro vehículo no está en condiciones o porque permanentemente nos estacionamos  donde queremos y no donde debemos. No nos interesa el otro”.

Y agregó: “Todavía nos falta muchísima responsabilidad individual. Todo  el mundo se queja pero todo el mundo también incumple. Y la gente no es que desconoce las normas de tránsito, pero no las cumple. Un ejemplo es el tránsito en las rotondas que cada uno hace lo que quiere con el paso”.

“Bariloche es muy compleja, hay demasiados autos, la ciudad no fue planificada para este tipo de tránsito y, si a eso le agregamos nuestra irresponsabilidad, tenemos un combo que es muy difícil porque no podemos poner un inspector en cada cuadra.  Tenemos que empezar a hacernos cargo y a generar acciones que sean seguras para nosotros y para los demás”, manifestó.

Sobre los datos que arrojan los controles de alcoholemia en los operativos, Painefil aseveró que “es un tema muy difícil” y aseguró que “Bariloche tiene una ordenanza muy estricta al respecto y es que cuando alguien da positivo se retiene  la licencia y el juez de falta establece el plazo que va a estar inhabilitado. Y luego hay que asistir a una charla técnica sobre los riesgos del consumo de alcohol al volante  y explicamos los riesgos de exceder  0,50 mg/L. Además tenés que volver a rendir la licencia. Bariloche ha sido ejemplo a nivel país respecto a esta ordenanza que la Agencia de Seguridad Vial la pidió para incorporar a la Ley Nacional”.

También, contó que “tenemos la suerte de que en el polo cervecero de Bariloche, donde hay mucha gente joven,  tienen muchas ganas de sumarse con nosotros, en trabajar en la problemática. Son los interesados número uno  en la responsabilidad que quieren, en el conductor designado y todas esas cosas que hacemos para ayudar.

“Después volvemos siempre a lo mismo, a la responsabilidad personal. Todas las medidas que se toman están bien y hay que poner más, pero la responsabilidad individual es la que define la conducta del ser humano”, finalizó Painefil. (ANB)