"No podemos permitir una postura pasiva ante la agresión de un grupo minúsculo de violentos"

Desde la Mesa Consenso Comarca Andina del Paralelo 42,  la Mesa Consenso Bariloche y la Cámara de Turismo local emitieron diversos comunicado a través de los cuales repudiaron los ataques que sufrieron los dos turistas en el corte de Ruta 40 el fin de semana.

"Expresamos nuestro profundo repudio a los brutales ataques que sufrieron dos turistas provenientes de Buenos Aires el viernes pasado en Villa Mascardi, en el marco de una protesta de la comunidad Lafken Winkul Mapu sobre la Ruta Nacional 40. Asimismo, instamos a las autoridades competentes a realizar una exhaustiva investigación acerca de las circunstancias en las que se produjo dicha agresión a fin de identificar y procesar a sus responsables", manifestaron en el primer texto.

Como resultado de estos ataques, los jóvenes debieron ser hospitalizados con heridas en sus cabezas y varios automovilistas denunciaron que fueron amedrentados e intimidados con palos y piedras. En este contexto, responsabilizaron a las autoridades nacionales, provinciales y municipales y exigieron que "implementen las medidas necesarias para garantizar el normal desarrollo de la temporada turística".

"No podemos permitir una postura pasiva ante la agresión de un grupo minúsculo de violentos que ponen en riesgo el turismo -principal motor económico de la región- sea cual fuere su reclamo. Es difícil dialogar con quienes optan por la agresión, la violencia y el amedrentamiento físico. Los reclamos ancestrales y/o territoriales deben canalizarse por la vía constitucional, pacífica y dentro de los canales legales que ofrece el Estado de derecho", finalizaba el comunicado.

En tanto, la Cámara de Turismo de Bariloche presentó ante la Justicia un Recurso de Amparo para garantizar la libre circulación. 

Desde el sector, expresaron que "es extrema la situación a la que están expuestos los turistas que eligen el destino luego de amplias campañas de promoción en el país y el mundo. Y aún más preocupante la falta de respuestas ante la situación por parte de las autoridades y organismos que debieran velar por la seguridad de los ciudadanos. No es posible omitir la obligación de los funcionarios de actuar en pos del resguardo de las personas y sus bienes, máxime cuando estos hechos delictivos ocurren en flagrancia y frente a los mismos. La omisión de dicha obligación constituye un delito en sí".