jueves 25 de abril de 2024

Coronavirus: “En un escenario tan difícil la sociedad reacciona de manera razonable y calma”

Como presidente de la Asociación de Sociólogos de la República Argentina, Daniel Natapof, habló con ANB sobre la sociedad en épocas de aislamiento y cuál es el rol de los científicos sociales en estos momentos.

sábado 21 de marzo de 2020
Coronavirus: “En un escenario tan difícil la sociedad reacciona de manera razonable y calma”

La globalización, el tiempo de los viajes, las migraciones, el intercambio comercial, todo ello avanza a una velocidad extraordinaria; y también lo hace para difundir un virus. La marcha del coronavirus en todo el mundo y las medidas de aislamiento que tomaron los gobiernos, han puesto en alerta a todas las sociedades. La declaración de pandemia por la Organización Mundial de la Salud, ha roto los esquemas del normal funcionamiento de las ciudades y de las economías.

Ante esta situación, las ciencias abordan el tema desde diferentes perspectivas para brindar un posible horizonte y analizar qué es lo que va sucediendo con el avance tan dinámico del virus Covid-19. Es así que el presidente de la Asociación de Sociólogos de la República Argentina (ASRA), Daniel Natapof, explicó a ANB que desde ese campo “buscan asesorar a los decisores políticos sobre el impacto de la implementación de determinadas cuestiones públicas. Por ejemplo, las implicancias de la alteración de la dinámica social, las consecuencias socio-psicológicas del aislamiento, el rol e impacto incontrolable de redes sociales, el tratamiento de los medios de comunicación, la incertidumbre económica-laboral, etcétera”.

Natapof, también ex concejal de la ciudad, destacó las políticas tomadas por el presidente Alberto Fernández y su equipo ante la pandemia mundial: “Fue temprana, firme y calma al mismo tiempo. También debe mencionarse una reacción madura y colaborativa de la principal corriente opositora”.

Por otro lado, de acuerdo a su observación, “en Bariloche, la reacción parece similar a la seguida en todo el país, acatamiento en general a las medidas, razonable incertidumbre y preocupación por el futuro económico y diversas dificultades a resolver respecto de la actividad comercial y laboral”.

“Sin embargo, respecto de un escenario tan complejo y difícil puede afirmarse que la sociedad reacciona de manera razonable y calma” añadió.

Desde el aspecto sociológico, Natapof instó que el acompañamiento en las políticas públicas es clave, “no sólo se trata de evitar el coronavirus”.

A lo cual agregó: “Hay numerosos factores sociales que inciden en la aplicación de una política: edad, género, situación socio-económica, los niveles de pobreza y desigualdad social, étnicos. Incluso el hábitat: no es lo mismo una zona residencial que vivir en situación de hacinamiento o un monoblock, por citar ejemplos evidentes. Pero que implican que las medidas generales requieren una adecuada segmentación para no profundizar desigualdades”, añadió puntualizando sobre la labor de los gobiernos provinciales y municipales en esta situación.

Consultado sobre el horizonte que se puede visibilizar acerca de un aprendizaje colectivo, el Presidente de ASRA dijo que “todo indica que las medidas serán pasajeras, pero hay que esperar la evolución del virus. El mundo capitalista y moderno avanza a toda velocidad, prontamente tiende a olvidar y negar situaciones traumáticas y continua con su vértigo y sucesión de novedades”.

De todos modos, el impacto social sobre las tasas de mortalidad, la distribución de la infección en un país, la duración del aislamiento social, la situación económica de cada nación y región, “sí van a requerir de la investigación social para arrojar resultados concluyentes”, especificó Natapof.

En conexión con el panorama social, el Sociólogo apunta a una cuestión poco optimista y señala que “ciertas visiones románticas que circulan por las redes respecto a la solidaridad que puede generar el coronavirus no se condicen con la realidad de un mundo con brutales desigualdades sociales que vive el mundo”.

No obstante, “se observa una actitud general responsable frente a los riesgos de contagio, una disciplina social que permite la aplicación de políticas públicas de emergencia”

Y finalmente, concluyó: “Siempre conservamos la fe en la posibilidad de que la humanidad emprenda un camino de reflexión colectiva y aprendizaje que nos ayude a mejorar como comunidad”. (ANB)

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