“No nos callemos más”: A una semana del intento de femicidio, Elisa encabezó una marcha

Por Gonzalo Contino

A pocas horas de cumplirse una semana que su expareja la intentara matar, Elisa González encabezó una marcha en Bariloche reclamando justicia.

“Me pude contactar con otras mujeres y la mamá de Valeria Coppa, para marchar y reclamar que esto se termine de una buena vez; no somos bolsa de boxeo de nadie”, aseveró González en diálogo con ANB.

Contó que desde el 18 de enero, Juan Manuel Ocampo, único imputado por el intento de femicidio, tenía una prohibición de acercamiento porque anterirmente la había amenazado con un arma de fuego. “Él no la cumplió y así terminé”, sentenció.

Finalmente reflexionó que “más allá de que hoy me toca encabezar esta marcha, quiero hablarle al resto de las mujeres; no nos callemos más, hay un montón de puertas que podemos abrir, tenemos voz y lo que me pasó a mí, no le tiene que pasar a nadie”.

Según la imputación, alrededor de la 01,30 del sábado 15 de febrero, Juan Manuel Ocampo intentó quitarle la vida a su ex pareja, la amenazó de muerte y le incendió la vivienda.

Cuando la mujer se encontraba durmiendo en su vivienda, se presentó en el lugar, rompió la puerta de ingreso y entró. Allí sin mediar palabra la golpeó salvajemente en el rostro,  la tomó del cuello con sus manos, e intentó asfixiarla mientras seguía golpeándola.

La mujer logró salir de la vivienda, luego de un intento fallido y continuó siendo golpeada, esta vez con una piedra de importante tamaño, dejándola tirada en el piso aturdida, cerca del portón del vecino. Cuando Ocampo concluyó su ataque y al ver que su expareja estaba tendida en el suelo sin reaccionar, ingresó nuevamente a la vivienda y la prendió fuego, provocando su destrucción total. La mujer logró salir del lugar y refugiarse en lo de un vecino, en tanto que el imputado se dio a la fuga.

Acompañando a Elisa en la marcha, estaba Marianella Ubilla, mamá de Valeria Coppa, la joven asesinada por su expareja hace poco más de un año en la plaza de la Catedral. “Cuando conocí el caso me estremeció. Cada vez que hay una mujer que muere o que lastiman, siento latigazos en mi corazón porque vuelvo a revivir absolutamente todo lo que pasó con mi hija”, destacó a este medio, agregando que “gracias a Dios, Elisa pudo sobrevivir a esta terrible golpiza y al intento de haberla querido quemar viva”.

Respecto al femicida de su hija, Mariano Cordi, sostuvo: “Pido que de una vez por toda se le confirme la pena al asesino de mi hija para poder vivir tranquila”.