“No está claro cómo ocurrió la muerte de Guillermo Garrido”

Este martes por la tarde se leyó la sentencia en el juicio por la muerte de Guillermo “Coco” Garrido en el calabozo de una comisaría de El Bolsón.

En primer término, tribunal compuesto por Sandro Gastón Martín, Gastón Pierroni y Gustavo Quelín declaró “no culpable del delito por el cual fueron acusados” los policías Laura Leiva y Emilio Oyarzún, quienes estaban imputados por homicidio culposo.

La acusación del Ministerio Público Fiscal, señalaba que Garrido se había suicidado en el calabozo de la comisaría con su cinturón, responsabilizando a los imputados por no hacer el debido control durante el ingreso y el encierro del joven.

La sentencia asegura que “no se puede confirmar que los hechos sucedieron tal como narro la Fiscalía” y que existe “más de una hipótesis como posible”

“La única realidad fáctica es que Guillermo Garrido murió cuando se encontraba en custodia de personal policial” y que “la muerte no ha sido natural”, pero “cómo sucedió esa muerte no ha sido acreditado”, destacaron los jueces.

La hipótesis de que Garrido murió por paro cardiorrespiratorio provocado por su ahorcamiento “encuentra anclaje probatorio en la autopsia, quienes no encontraron lesiones externas del cadáver, indicando lesiones típicas por ahorcamiento y surco de ahorcamiento; sumado las testimoniales del personal policial declararon en ese sentido”, pero a su vez señala que la doctora Emma Viviana Creimer presentó una “ realidad fáctica diferente a la sostenida por la acusación pública”, en la cual “el resultado muerte no ha sido consecuencia de un suicidio, sino una acción deliberada de terceros”

Finalmente, la sentencia dice que las “dos hipótesis resultan factible, se contradicen y se niegan” y que “están ausentes elementos de prueba que demuestren que una es cierta y la otra imposible, una duda insuperable para decidir que sucedió en la comisaría”.

El 11 de diciembre se realizará la lectura íntegra de la sentencia con sus fundamentos. (ANB)