La palabra de un sobreviviente
Recordaron la tragedia de Austral, a 30 años
A treinta años del fatal accidente aéreo que terminó con las vidas de medio centenar de personas a pocos kilómetros de Bariloche, Leonardo Gadaleta, uno de los sobrevivientes, recordó la tragedia. "Tuve la suerte de salvarme y le agradezco a Dios que me haya devuelto la vida", expresó.
El 20 de noviembre de 1977, tres décadas atrás, un aeroplano Bac One Eleven 111 de la empresa Austral se estrelló contra un cerro a 21 kilómetros de la ciudad. En él, viajaban 31 parejas que llegaban a disfrutar de su luna de miel.
"Había muchos mieleros", recordó ayer Gadaleta en diálogo desde Avellaneda con El Monitor (Radio "O"), y narró: "Tomamos el avión y todo fue muy lindo durante el viaje, pero al llegar a Bariloche el piloto nos informó que no podíamos aterrizar porque estaba la pista ocupada, y que teníamos que dar una vuelta. Luego, nos aconsejó que nos abriguemos, porque hacían 3 grados bajo cero", contextualizó.
"Allí, sentimos un golpe fuerte que desintegró al avión", relató el sobreviviente, y agradeció: "Afortunadamente logramos tomar altura por una maniobra que hizo el piloto, por la que hoy estamos vivos".
Sin embargo, 46 personas perdieron la vida en la tragedia. Entre ellos, cinco miembros de la tripulación. Sólo se salvaron 33 pasajeros, entre los que estaba Leonardo Gadaleta y su mujer, Miguela Grasso, que viajaban para festejar sus bodas de plata.
Leonardo perdió el conocimiento en ese momento, y recién lo recobró en el hospital. En el accidente "me cortaron las alas", reconoció; y explicó que "yo era techista y después de la tragedia tuve que encerrarme en un negocio. Me modificó totalmente la vida".
Si bien nunca quedaron claros los motivos del accidente, aseguró que "la hermana del piloto nos dijo que se había averiado el altímetro".
Gadaleta, que hoy es propietario de una ferretería en Avellaneda, priorizó: "Le doy gracias a Dios que me permitió estar vivo y disfrutar de mis hijos". (ANB)
