Grupo comando busca evitar juicio ofreciendo plata y tareas comunitarias
Los tres procesados solicitaron la suspensión del juicio a prueba. Ofrecieron dinero a las víctimas y tareas comunitarias. Sigue prófugo el jefe del grupo.
A través de la figura de la suspensión del juicio a prueba, los tres procesados por los violentos hechos de noviembre de 2009 en la Península San Pedro, podrían evitar sentarse en el banquillo de los acusados durante la instancia oral del juicio.
Pocas horas antes del inicio del juicio, el defensor del ex subgerente de Seguridad de Arelauquen, Cristian Aquino, solicitó la aplicación del instituto de la suspensión del juicio, a pesar que si defendido continúa prófugo.
Ofreció, según pudo saber ANB, el pago a los tres denunciantes de la suma de 10 mil pesos a cada uno, más la realización, por el término de un año y durante seis horas semanales, de tareas comunitarias en la localidad en la cual reside. Llamativamente, la Justicia rionegrina desconoce su paradero, el cual sería dado a conocer por su defensa en caso que la Cámara Penal acepte la suspensión del juicio.
En tanto, los otros dos integrantes del grupo comando que actuó en el ataque, José Ceballos y Gustavo Lugo -ex vigiladores de Arelauquen-, propusieron la realización de tareas comunitarias por el término de seis meses, durante dos días por semana.
Ahora, las víctimas del hecho - Rafael Boné, Joel Maximiliano Contreras Velázquez y Joel Indalisio Contreras Bahamondes- deberán responder si aceptan la oferta o insisten con la realización del juicio oral. En un mismo sentido deberá pronunciarse el Fiscal de Cámara, Martín Lozada.
El artículo 76 bis del Código Penal indica que "el imputado de un delito de acción pública reprimido con pena de reclusión o prisión cuyo máximo no exceda de tres años, podrá solicitar la suspensión del juicio a prueba".
Según quedó plasmado en la elevación a juicio, en noviembre de 2009, Aquino, Ceballos y Lugo, arribaron a la Península San Pedro a bordo camionetas del barrio privado Arelauquen, y vistiendo ropas “militares mimetizadas, armas de fuego tipo ametralladoras, ithacas, pistola 9 mm. y cuchillos tipo 'Rambo'.
En su ataque, “privaron de la libertad” a las tres personas mencionadas: los privaron de su libertad, golpearon, amenazaron y robaron, consta en la causa.
El violento hecho se enmarca en una disputa por tierras que involucra al propio Boné -quien había logrado una escandalosa usucapión-, y reconocidos empresarios de Bariloche. (ANB)
