jueves 28 de marzo de 2024

El caos vehicular en la zona del Monolito es cada vez más insoportable

Las largas filas de autos ya son moneda corriente. Cuando esté finalizado el edificio Capitalinas, el problema se agravará. Un novedoso proyecto de ciclovía que nadie tuvo en cuenta.

miércoles 23 de enero de 2019
El tráfico de automóviles aumenta y los reclamos se multiplican.
Foto: Hernán Barabini.
Foto: Hernán Barabini.

Por Nicolás Malpede

El intenso tráfico vehicular que se registra desde hace un largo tiempo en Bariloche genera cada vez un mayor malestar entre vecinos y turistas. Las calles y avenidas están colapsadas por el tránsito de rodados. El sector del Monolito, por caso, es un punto de conflicto extremo que no parece tener solución.

Desde el “mini” Obelisco hacia el oeste por Bustillo, en tan solo 200 metros están emplazados el Sanatorio San Carlos, una fábrica de chocolates, el complejo turístico Cerro Viejo, varios hoteles y la polémica obra del edificio Capitalinas.

Cruzar la avenida Bustillo, una verdadera odisea (foto: Hernán Barabini). 

En la zona se suscita al mediodía y a la tarde un embotellamiento de vehículos sumamente caótico. El grave problema lo sufren quienes van en dirección al centro o bien aquellos que circulan por la Costanera hacia los kilómetros.

A la enorme cantidad de vehículos que transitan por Bustillo se le suman las variadas maniobras que realizan los conductores al ingresar o salir de cada edificación ubicada a la vera de la cinta asfáltica.

Las filas de autos son extensas y pueden alcanzar varios kilómetros, provocando las quejas de vecinos y turistas que constantemente se comunican con ANB para plantear la situación.  

Los vecinos se quejan y las soluciones brillan por su ausencia. 

Capitalinas, la obra de las irregularidades y multas que agravará aún más el problema

La obra del edificio Capitalinas, ubicada en el kilómetro 1 de Bustillo, también ocasiona un movimiento de rodados y de gente que contribuye al caos.

Cuando las instalaciones estén finalizadas, el flujo de personas y vehículos en la zona aumentará su volumen notoriamente, lo que incrementará el caótico tráfico en este sector.

El expediente de la obra ingresó al Concejo Deliberante en 2006, pero fue aprobado en 2009 durante la gestión del en ese entonces intendente radical Marcelo Cascón.

En temporada alta la problemática aumenta (foto: Hernán Barabini). 

El proyecto fue presentado por Arturo Iglesias Paiz y Adriana Nielsen, para levantar un edificio de 11.809,14 metros cuadrados sobre dos parcelas que suman 4.400 metros cuadrados.

Al primer documento se le realizaron numerosas modificaciones, ya que no cumplía con varios puntos de la normativa vigente del Código de Planeamiento y del Código Urbano

Así quedaría el edificio una vez finalizado: la costa del lago será parte del jardín del sitio. 

Finalmente, los trabajos empezaron en 2011 pero los traspiés de la empresa llevaron a paralizar la construcción en reiteradas ocasiones.

La obra fue polémica desde el principio pero sin embargo en la actualidad presenta amplios avances. En los últimos años sufrió varias paralizaciones y multas por diferentes irregularidades.

Tiempo atrás, en la página web del proyecto inmobiliario informaron que los exclusivos departamentos estarían finalizados a finales de 2017. El edificio contará con más de 60 unidades habitacionales y 47 habitaciones de un lujoso hotel.

Un novedoso proyecto totalmente desestimado

Si bien la solución al caos vehicular hasta el momento parece no aparecer, en 2015 surgió un atractivo proyecto desestimado tanto por la ex intendenta María Eugenia Martini como por el actual jefe comunal Gustavo Gennuso.

Martín Lambrechts, referente de Bicicletas por la vida -organización que se creó luego del trágico fallecimiento de Pablo Ramos, quien en marzo de 2014 fue atropellado en el kilómetro 19 mientras circulaba en bicicleta junto a otras personas- señaló a ANB que en 2015 presentaron a Martini (en aquel momento intendenta) una propuesta para recuperar las banquinas de Bustillo, entre el Monolito y Bahía Serena, con el objetivo final de construir una ciclovía.

“La intención era incentivar el uso de la bicicleta, disminuir los accidentes viales y descomprimir el intenso tráfico vehicular”, afirmó.

“Lamentablemente no se avanzó demasiado con Martini y con Gennuso la situación hoy en día es similar a la de aquella vez o incluso peor, ya que desde Bicicletas por la Vida no logramos tener un diálogo fluido con él para trabajar en conjunto”, sostuvo.

El documento remarca que el propósito es analizar la prefactibilidad técnica de la ejecución de una ciclovía en el tramo comprendido entre el kilómetro 1 y el 12,2 de Bustillo.

Sostiene que la ejecución de la bicisenda contribuiría a un aumento de la seguridad vial de todos los usuarios y asegura que es "completamente viable" desde el punto de vista técnico, ya que "presenta poca complejidad desde esta perspectiva, con la excepción de unos pocos sitios puntuales".

"Por la falta de espacio la tipología de ciclovía más adecuada a la configuración de esta avenida es la adición de carriles unidireccionales de circulación exclusiva para bicicletas a cada lado de la calzada existente", señalan en el proyecto.

"El ancho del carril de uso exclusivo para bicicletas debe ser de 1,5 m., con un mínimo recomendable de 1,2 m. en sectores donde las limitaciones de espacio no permitan lo anterior", informa el documento. (ANB)

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