Buscan proteger a niños y niñas de la explotación sexual y el trabajo infantil

Este lunes (13/8) el intendente Gustavo Gennuso participó de la Firma del acta acuerdo para promover el Código de Conducta por la Protección de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes en Viajes y Turismo, convocada por ASEET Patagonia.

La rúbrica estuvo encabezada por la presidenta de la institución Silvia Luzzardi y contó con la participación de Susana Cafaro, miembro del área de Ética y Responsabilidad Social del Ministerio de Turismo de la Nación y representante de ASEET Patagonia en dicho organismo, y del vice rector de la Sede Andina de la Universidad Nacional de Río Negro Roberto Kozulj, el secretario de Turismo y Producción de la comuna Gastón Burlon y Felipe Orticelli, presidente de la Cámara de Turismo de Bariloche.

El intendente Gennuso destacó que “hace tiempo que estamos charlando con ASEET por la firma de este acta acuerdo.” “Las ciudades turísticas, sobre todo en un mundo globalizado, tenemos que estar muy atentas y es mejor estar prevenidos, tenemos que tomar pasos anticipatorios”, puntualizó.

“Nos parece que es un compromiso de una ciudad turística como es Bariloche, una de las más importantes del país, adherir a este Código de Conducta”, sentenció el jefe comunal.

Por su parte, la UNRN se comprometió a realizar actividades de extensión y proponer acciones para los y las estudiantes del Programa de Trabajo Social que trabajen sobre esta área. Asimismo, se incluirán aspectos del código en los contenidos mínimos de las materias de turismo con el fin de generar conciencia.

Convocado por ASEET Patagonia, y en el marco de la iniciativa del Ministerio de Turismo de la Nación para sumar conciencia y responsabilidad empresarial e institucional, a través de la firma el municipio se compromete a sumarse a esta iniciativa preventiva a la explotación sexual comercial, del trabajo infantil y de la trata para ambos fines.

Así la ciudad queda de este modo inscripta como localidad pionera en una convocatoria inédita e integral a nivel nacional que se continuará replicando en otras localidades de la región.

Entre los criterios señalados por el código de conducta, se inscriben el interés de establecer, educar y comunicar la política ética en el interior de cada organización del turismo; explicitar en los contratos con proveedores el rechazo a la explotación infantil y proporcionar información a turistas, agentes locales, periodismo y población en general. (ANB)