martes 19 de marzo de 2024

Se puso a nadar en el Nahuel Huapi bajo la nieve

“Todos me dicen que estoy loca”, confiesa Laura, quien el sábado estuvo 40 minutos en el agua viendo caer la nieve. ¡No te pierdas las fotos!

lunes 19 de junio de 2017
Selfie desde el agua.

Por Nicolás Malpede

El sábado caía una intensa nevada sobre la ciudad. Eran las 14,30. Hacía frío, y mucho. Laura Mavric salió del trabajo y tuvo una loca ocurrencia: se enfundó en su traje de neoprén, respiró profundo, infló el pecho, juntó coraje y se lanzó de cabeza al lago Nahuel Huapi.

¿Cómo fue la experiencia? La joven de 35 años lo resume con una sola palabra: extraordinaria. “Es increíble ver los copitos de nieve fundirse en el agua”, destaca.

“El lago estaba re calmo y sumamente desierto. Era todo para mí”, dice Laura, y suelta una fuerte carcajada. “Me tiré a la altura del Centro Cívico. Había dos turistas cerca de la costa que me miraban sorprendidos y saludaban”, agrega.

Laura, en plena acción. 

El termómetro marcaba que la temperatura del agua era de 5º y -2º en el ambiente. Sin embargo, Mavric nadó un buen rato. “Estuve 40 minutos y salí. No daba para estar mucho tiempo más por el frío. Recorrí cerca de 15 metros hacia adentro”, cuenta.

“En esta época del año, hay que tirarse al lago, darse un chapuzón, dar una vueltita y salir rápido”, remarca la deportista, quien practica natación en Piletas del Nahuel desde 2013.

“Lo que más me gusta es nadar en aguas abiertas. Me apasiona, porque experimento una sensación extraordinaria de libertad”, resalta Mavric.

Laura señala que a la hora de nadar en el Nahuel Huapi hay que tomar ciertos recaudos, ya que se trata de un lago “muy complejo”.

“Hay muchas corrientes de agua frías que van por abajo y que pueden ser peligrosas. Por eso siempre estoy atenta para identificar hacia dónde van y en función de esa información definir en qué dirección tengo que ir”, explica la mujer, quien se zambulló al agua el sábado con el traje de neoprén, antiparras, gorro y un “torpedo”, elemento de flotación que brinda una buena seguridad en este tipo de destrezas.

La nadadora aprovechó la ocasión para tomarse varias selfies con el Centro Cívico de fondo. “Desde adentro del agua es otra postal”, advierte.

Laura siempre nada sola en el lago. Antes iba con su hijo Marco, de 18 años, pero ya no. “Se cansó y no me acompaña más. Él y mis amigos y otros familiares me dicen que estoy re loca”, confiesa, y ríe.

La joven el año pasado realizó otra aventura: en pleno invierno nadó en la fría laguna Toncek, ubicada a pocos metros del refugio Emilio Frey, en el cerro Catedral. “Tenía tremendas placas de hielo. Ahí sí que sufrí. No sentía el cuerpo”, recuerda.

Además de natación, esta aventurera practica Artes Marciales Mixtas (MMA) y boxeo. “No imagino mi vida sin el deporte”, asegura. En aguas abiertas compite hace ya varios años. "Siempre logro algún podio", subraya, orgullosa. 

ANB: ¿Te vas a meter otra vez en el Nahuel Huapi en las próximas semanas o vas a esperar los días de calor?

L.M.: ¡Obvio que voy a meterme! Todas las veces que tenga ganas. Ya estoy acostumbrada al frío. No lo sufro. Lo disfruto. (ANB)

Te puede interesar
Últimas noticias