jueves 28 de marzo de 2024

Peligro latente: cada vez son más los motociclistas sin casco

Sólo 11 inspectores de tránsito fiscalizan todo el ejido urbano. Fotos y video. Informe de ANB.

domingo 19 de febrero de 2017
"Falta concientización y control", reconocen desde el municipio.
Foto: Emiliano Rodríguez.
Foto: Emiliano Rodríguez.

Por Nicolás Malpede

Ver una persona circulando en moto sin casco es una acción que se puede realizar en Bariloche con absoluta facilidad, muchas veces al día.

Chicos, adolescentes y adultos, transitan por las calles sin utilizar este elemento de protección clave. Lo hacen a cualquier hora y en todos lados. ¿Los controles y las multas? Brillan por su ausencia o al menos son escasos.

Carlos Catini, asesor del área de Tránsito y Transporte de la municipalidad, reconoció que la situación es “muy grave”. Dijo que “lamentablemente” los vecinos “no entienden lo importante que es usar el casco”.

Indicó que falta mayor fiscalización en las calles, pero advirtió que la comuna cuenta en la actualidad con sólo 11 inspectores para controlar todo el ejido urbano de Bariloche. Sostuvo que ese número se debe a que algunos empleados se encuentran de vacaciones o con licencias, aunque aclaró que los trabajadores abocados al control del tránsito nunca son más de 15. 

Lo cierto es que en muchos casos, a la falta de casco se le suma la imprudencia con la que los motociclistas transitan por las colapsadas calles de la ciudad.

El pasado 14 de enero un joven murió tras perder el control del ciclomotor en el que circulaba por Pasaje Gutiérrez y caer sobre la cinta asfáltica. Se desconoce si llevaba el casco puesto, pero falleció a causa de un severo traumatismo de cráneo. Vivía en el barrio 400 Viviendas y tenía 22 años.

Yendo más atrás en el tiempo, el 28 de marzo del año pasado otros dos motociclistas perdieron la vida en un choque ocurrido en la ruta 40 Sur, a la altura del barrio El Frutillar. Jonathan Elías Castillo Flores de 20 años y Axel Damián Gallardo de 21 impactaron de frente y perecieron en el lugar del hecho. Sobre el suelo había sólo un casco, lo que permite establecer que al menos una de las víctimas iba sin protección en la cabeza.

La lista de motociclistas heridos y muertos en los últimos años es extensa. Los siniestros viales protagonizados por personas que circulan en ciclomotores se multiplican semana a semana y, a la luz de los hechos, desde el Estado aún no se toman las medidas necesarias para abordar la problemática en todas sus aristas.

¿Y el casco? (foto: Emiliano Rodríguez)

Catini informó que ante esta preocupante problemática, desde Tránsito en un corto plazo realizarán una “reorganización de personal” con el fin de “traer a nuestra área empleados de otros sectores y capacitarlos para que puedan convertirse en inspectores y de esta manera aumentar el número de fiscalizadores en las calles”.

Afirmó que “también hay un problema de concientización” y en este sentido planteó la necesidad de “más campañas de seguridad vial”.

Sin dar números precisos, aseguró que el municipio multa “permanentemente” a motociclistas que no llevan el casco, debido a que infringen la Ley Nacional de Tránsito 24.449. No obstante, insistió en la poca cantidad de inspectores para cubrir tanto espacio.

La Subsecretaría de Tránsito se encuentra acéfala desde el pasado 3 de febrero, jornada en la que Ernesto Cosovi presentó la renuncia a su cargo de subsecretario. Por desacuerdos con su manera de desenvolverse, el intendente Gustavo Gennuso decidió apartarlo del puesto.

Por el momento no hay reemplazante y en la práctica, al igual que cuando estaba Cosovi, Catini sigue siendo el líder del área y el encargado de manejar su rumbo.  

Luego de que el concurso interno no diera resultados, la municipalidad abrió semanas atrás las puertas e impulsó un concurso externo para ocupar el cargo vacante de director de Tránsito. En este marco, el jefe comunal continúa evaluando el nombramiento del nuevo subsecretario.

Por su parte, Cristina Painefil, concejal y presidenta de la Comisión de Servicios, Tránsito y Transporte, resaltó que “muchos jóvenes no quieren usar el casco para no despeinarse”. “Suena disparatado, pero es así”, añadió.

Advirtió que “lamentablemente vemos todos los días chicos sin casco, pero también adultos”. “No creo que tenga que ver con una cuestión de edad. Falta concientización. Es un problema cultural”, opinó.

La concejal resaltó que muchos motociclistas tampoco tienen asegurados sus rodados ni cuentan con carnet de conducir. Señaló que desde el Concejo Deliberante hace un tiempo impulsaron una campaña a través de la cual regalaron cascos y concientizaron sobre seguridad vial.

“Algo muy habitual es que los padres les regalen motos a sus hijos y como son menores no pueden obtener su licencia. Por lo tanto tampoco adquieren un seguro”, explicó Painefil.

Painefil impulsó en 2016 una ordenanza -ya vigente- que modificó algunos de los requisitos para que los jóvenes puedan obtener el carnet de conducir por primera vez. Ahora, tienen la posibilidad de conseguirlo a los 16, pudiendo optar por una moto de hasta 110 centímetros cúbicos para transitar en el ejido urbano local.

Jóvenes y adultos sin cascos, una postal frecuente (foto: ANB)

Aclaró que a los 18 los jóvenes deben tramitar el carnet nacional. Para ello es necesario cumplir con el requisito de contar con dos años de experiencia en moto. La licencia municipal la obtienen con autorización de un tutor mayor de edad y les prohíbe llevar acompañante en el rodado.

Explicó que la intención de su iniciativa es que “los chicos tengan seguro y estén más resguardados”. “De este modo se va generando conciencia entre los jóvenes, quienes empiezan a acostumbrarse a transitar respetando las normativas y es una manera de colaborar para que adquieran el hábito de ponerse el casco porque también es una obligación”.

“El casco no lo uso casi nunca. Tampoco tengo carnet, ni seguro. Ya sé que está mal lo que hago, porque es peligroso”, reconoció Martín, de 23 años, tras estacionar su  motocicleta Zanella de 110 c.c. en calle Moreno, entre Rolando y Palacios. 

Juan, de 19 años, tiene una moto Honda 150 c.c. “Ahorré plata durante varios meses y con la ayuda de mi viejos me la pude comprar. La tengo nuevita y tiene seguro. ¿El casco? No, no lo uso”, señaló.

La ordenanza 2454-CM-13 prohíbe el expendio de cualquier tipo de combustible a los conductores de motocicletas, vehículos cuatriciclos y triciclos motorizados -y a sus acompañantes- que al momento de realizar la carga no circulen con el casco correspondiente.

En 2016 se registraron reiteradas agresiones de diversa índole a playeros, que trasladaron su preocupación a los propietarios de las estaciones de servicio. El tema, incluso, fue abordado varias veces en la Comisión de Servicios, Tránsito y Transporte.

“Es un problema difícil de solucionar, porque con sanciones severas no alcanza. Desde el Estado tenemos la obligación de concientizar y en ese camino estamos yendo”, remarcó Painefil. (ANB)

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