Los 15 protagonistas de la política de 2016

Con mayor o menor protagonismo, fueron las figuras políticas que tuvieron un paso destacado en este 2016:

Gustavo Gennuso: Tras varios intentos infructuosos, el ingeniero finalmente llegó a la intendencia de Bariloche. El primer año de su gestión estuvo marcado por numerosos conflictos y con polémicas vinculadas al tema del transporte público, los feriantes de Onelli, y continuos roces con funcionarios que no son de su partido.

LO BUENO: Mantiene una estrecha relación con el gobierno provincial y algo más protocolar con el gobierno de Macri.

LO MALO: En ocasiones, se muestra soberbio e “inalcanzable”.

Alberto Weretilneck: El gobernador logró un verdadero record en visitas institucionales a todas las ciudades de la provincia y Bariloche no fue la excepción. Inauguró obras, participó de actividades sociales y partidarias y construyó fuerza propia en la ciudad, donde incluso reunió a todos los referentes de su sector para darle forma a su propio partido político: Juntos Somos Río Negro (JSRN). Terminó un año con complicaciones económicas y endeudándose para el pago de salarios. No logró resolver temas importantes como la reforma del Código Procesal Penal y la Reforma del Nivel Medio. El desempeño en el crimen del policía Lucas Muñoz de los funcionarios de su gestión dejaron muchas críticas y afectó de manera directa su imagen. Irá por la re-reeleción...?

LO BUENO: Tiene mucha presencia territorial.

LO MALO: Pasa más tiempo viajando que en Viedma.

Pablo Chamatropulos:

El jefe de Gobierno llegó a asumir sus funciones ya envuelto en polémica. El no ser de Bariloche le salió caro en la opinión pública que se mostró en contra de que alguien de Buenos Aires asuma un rol tan importante. Estuvo presente en todo momento respaldando al intendente y ocupando su lugar cuando éste viajaba.

LO BUENO: Casi siempre se muestra abierto al diálogo y tiene presencia en todos los conflictos.

LO MALO: El no ser de Bariloche lo lleva a desconocer muchas realidades.

Julieta Wallace:

La vicepresidenta del Tribunal de Contralor ganó presencia en las últimas semanas luego de haber protagonizado un enfrentamiento directo con el intendente en  relación al vertedero municipal. La abogada no es polémica, pero se mantiene firme en sus convicciones políticas en cuanto a su puesto se refiere.

LO BUENO: No abandonó el trabajo social que mantiene desde hace muchos años.

LO MALO: Se vio envuelta en un conflicto que todavía no se sabe cuál será el final.

María Eugenia Martini:

La exintendenta de la ciudad ocupó el rol de la oposición sin tener cargos políticos definidos. Con golpes y contragolpes, la militante del FpV estuvo presente todo el año y respondió cada una de las acusaciones de Gustavo Gennuso.

LO BUENO: Es una militante de la política y de los medios de comunicación (no perdió contacto con ninguno de ellos).

LO MALO: Le faltó autocrítica, no reconoció las falencias que tuvo durante su gestión.

Juan Martín:

Como sucedió en varias etapas de su vida, cuando comenzó desde muy joven en las filas del menmismo, supo reinventarse y reciclarse. Desde que Mauricio Macri llegó al poder, Martín se afianzo como la mano derecha de Rogelio Frigerio en Río Negro. En 2017, buscará un lugar entre los candidatos a diputado nacional.

LO BUENO: Es un gestor de proyectos para las pequeñas y grandes ciudades de Río Negro.

LO MALO: Su íntima amistad con el intendente de Roca, Martín Soria, lo dejó muchas veces en el medio de polémicas con el jefe comunal de Roca.

Daniel Natapof:

Su presencia en el Concejo Deliberante es importante, y es quizás, el edil con más fuerza del bloque del Frente para la Victoria. Presentó varios proyectos interesantes y se mantuvo siempre crítico con la gestión del gobierno municipal. Además fue reconocido por su trayectoria como sociólogo y preside una asociación de carácter nacional.

LO BUENO: Tiene una excelente oratoria y se desempeña muy bien en las sesiones.

LO MALO: No realizó autocríticas de su gestión como secretario de Gobierno de María Eugenia Martini.

Luis "Chicho" Suero:

Su trabajo social es incansable y se mantiene a lo largo de muchísimos años. Reconocido por su trabajo en CreArte, el dirigente social es uno de los personajes más queridos de la ciudad. Este fin de año tuvo un cruce con el intendente y esto le trajo algunas críticas.

LO BUENO: No se aleja de su trabajo con personas con discapacidades.

LO MALO: No tiene el ejercicio político de enfrentarse a un "peso pesado" como el intendente aunque tuvo el apoyo de muchas organizaciones sociales.

Silvina García Larraburu:

La senadora bajó el protagonismo desde que Miguel Ángel Pichetto perdió la gobernación. Luego de su alejamiento del presidente del bloque del FpV, Larraburu continuó con muy bajo perfil en la ciudad. Dejó los actos públicos y rara vez se la ve dialogando con los medios.

LO BUENO: Continúa trabajando con sectores relegados de la Línea Sur.

LO MALO: Parece haber dejado de lado a Bariloche.

Alejo Ramos Mejía:

El legislador se mostró más activo ahora que durante los años que fue concejal de la ciudad. Siempre apoyando al FpV, impulsó varios proyectos y críticas constructivas, sobre todo en relación a la cantera municipal.

LO BUENO: Parece haber incrementado su trabajo desde que ganó su lugar en la Legislatura.

LO MALO: No se lo ve por Bariloche, al menos en funciones oficiales.

Arabela Carreras:

La legisladora tuvo un 2015 con gran presencia en Bariloche y en los medios de comunicación, pero el 2016 la encontró sin grandes protagonismos ni declaraciones que merezcan poner el foco en su gestión. Este año mayoritariamente estuvo ligada al trabajo en el Polo Productivo y no se la vio en tantos actos protocolares.

LO BUENO: Tiene relación directa con todos los medios de comunicación.

LO MALO: Nadie sabe el motivo, pero este año su protagonismo politico fue muy limitado.

María Emilia Soria:

Aunque para muchos llegó a ser diputada nacional por “portación de apellido”, María Emilia supo destacarse de sus pares en el Congreso y se transformó en una referente del Frente para la Victoria en la Cámara Baja. Con su propio estilo crítico para con el gobierno de Macri, visitó Bariloche en reiteradas ocasiones acompañando a la exintendenta María Eugenia Martini.

LO BUENO: Logró un estilo propio para comunicarse con la gente.

LO MALO: Tiene el “termómetro Soria” y se enoja rápidamente.

Magdalena Odarda:

La senadora se despegó de Elisa Carrió y eso no le restó consenso, al contrario, mantuvo la adhesión que le dan las causas que nunca ha abandonado como la contaminación, la protección de animales y de la soberanía nacional.

LO BUENO: Llevó al Senado proyectos que impusló durante su campaña.

LO MALO: Perdió contacto territorial con la provincia.

Miguel Ángel Pichetto:

El senador del Frente para la Victorio hizo lo que mejor supo hacer siempre: ser oficialista. Desde la llegada de Mauricio Macri a la Casa Rosada, Pichetto se encargó de ser un nexo entre peronistas y gobierno.

LO BUENO: Ayudó a construir gobernabilidad.

LO MALO: Desde que perdió la gobernación, se olvidó de la provincia.

Rodolfo Aguiar:

En 2016 consolidó su poder en la Asociación de Trabajadores del Estado a nivel provincial y nacional. Para muchos es la oposición “ausente” al gobierno de Alberto Weretilneck.

LO BUENO: Logró importantes reivindicaciones para los trabajadores.

LO MALO: Muchas veces los utilizó como “fuerza de choque”.