Los oprimidos se sublevan
El derribe de la estatua de Roca, representa revisionismo histórico en acción. Revisar la Historia y actuar en consecuencia, nunca puede resultar anacrónico. Que los grupos de personas más desprotegidos por el Estado, accionen no sorprende. Que los sectores más acomodados se molesten, tampoco. Es que en el relato no oficial, el verdadero, el alzamiento de las clases sociales excluidas dio curso a la Historia y concibió los grandes procesos refundacionales.
La Historia está atravesada por la violencia, ejercida por y contra los pueblos oprimidos. La violencia motoriza la Historia. La imposición por la fuerza, la reacción y la contrareacción. Es ése el silogismo. Es ésa la Historia no oficial.
El rumbo de la Historia puede cambiar por una persona y de un momento a otro. Pero derribar el monumento de un genocida, no fue una decisión de una persona ni de un grupo. Fue la decisión de un proceso. De una fuerza transformadora, con trasfondo social.
Es que la crisis económica y social que atraviesa a Bariloche desde hace años y que se profundizó en los últimos meses, resulta ser el proceso que devino con lo sucedido en el Centro Cívico de la ciudad. Un proceso con responsables y culpables. Un proceso que tuvo una previa explosión en la marcha contra el gatillo fácil que le quitó la vida a un chico, y la represión policial que mató a otros dos. Un proceso histórico que toma una bandera, y que apela a que los barilochenses se encolumnen detrás, a través de la decisión por referéndum. Cambiar la Historia, modificar el relato oficial.
Que los oprimidos se subleven, que la clase política no especule con el legítimo reclamo de cerrar un capitulo de la nefasta historia oficial y de pedir trabajo. Y ese pedido, el trabajo digno y los derechos básicos, no se alejan un céntimo del intento de tirar abajo la figura de Roca. ¿O acaso el ex presidente y General no es responsable de que los Pueblos Originarios no sean poseedores de las tierras que les pertenecen? ¿De que muchos de sus descendientes deban protagonizar tomas y ser criminalizados en la extrema necesidad y la ausencia del Estado? ¿No es culpable de que los Pueblos Originarios hayan sido desplazados de las grandes decisiones? Cuántos compañeros ideológicos de Roca, gobiernan hoy y replican la historia.
Es que algunos consideran que el etnocentrismo de la época de "conquista" justifica. Y depende entonces del revisionismo histórico del Estado de Derecho, argumentar y accionar en consecuencia. Lo cierto es que los Derechos Humanos son atemporales y no están sujetos contextos sociales o históricos. Los hechos, aunque sean segados, no fluctúan de acuerdo al cambio de valores desde el que son analizados. Pero sí pueden ser reinterpretados y juzgados a tiempo.
Carolina Cohen
